martes, 28 de julio de 2015

La sorpresa




Concurso "Microterror III" del Círculo de escritores


En la tienda de antigüedades había un rincón oscuro, apartado del resto de objetos y artilugios. Aprovechando que el dependiente estaba ocupado, decidí averiguar qué se ocultaba entre las sombras. Que desilusión me llevé al comprobar que era una simple máscara de payaso. O tal vez no.

Avancé un paso hacia el rincón.

El maquillaje envolvía unos ojos que me miraban.

Avancé otro paso.

El muñeco estaba recostado en una silla, con una sonrisa que no parecía real.

Avancé medio paso.

No era un muñeco.

Movió ligeramente la cabeza y su sonrisa se tornó siniestra.

Asustado, corrí instintivamente hacia la puerta. Empecé a tirar de ella, pero no quería abrirse. 

Angustiado, me di la vuelta y vi que estaba completamente solo. Entonces, desde el fondo, el payaso se levantó y empezó a moverse lentamente. No hablaba, solo me miraba con esa horrible sonrisa. 

En ese instante se apagaron las luces y oí unos pasos que se acercaban hacia mí cada vez más deprisa, acompañados de una risa indescriptible. Grité mientras sacudía desesperadamente el picaporte.

Acto seguido, me desperté empapado en sudor. 

La pesadilla había terminado. 


17 comentarios:

  1. Estupendo Micro amigo.
    suerte en el concurso.

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  2. Estupendo. Los payasos son seres terroríficos.
    Menuda pesadilla.
    Un saludo

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    1. Gracias Oscar, por comentar y compartir, un saludo :)

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  3. Una pesadilla realmente angustiosa. Saludo!!!!

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  4. Muy angustiante, me he imaginado a ese payaso con cara de muñeco diabólico y ¡pobre! que pesadilla tan horrible y que alivio despertarse.
    Un saludo

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    1. El payaso puede ser lo peor que te puedas imaginar, saludos!! =)

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  5. Un micro de pesadilla bien orquestado. El payaso y el encierro, angustioso instante y alivio final.
    Saludos, compañero.

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  6. Saludos Sergio Martínez, un relato muy bien llevado, transmite la escalofriante pesadilla. Éxitos y bendiciones!

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  7. He de reconocer que me decepcionó un poco el final, por lo del sueño, pero me encantó el resto. Logras que el lector pase miedo con esa buena narración, creando una tensa atmósfera preñada de terror y espera por parte del protagonista. Poco a poco nos acercas a ese juguete de payaso, poco a poco nos revelas que no es un juguete, y luego aceleras la escenas en un intento de huida fallido, pues la puerta está cerrada. A continuación el payaso se levanta de la silla y se aproxima al aterrado protagonista y ¿acaba ahí el horror? No. Aún queda algo. Las luces. De pronto se apagan. Lo que faltaba para acabar de aterrarnos.
    Pienso quedaría mejor abierto, en vez de una pesadilla, pero esto es solo un apunte. Por lo demás, excelente relato.
    Saludos.

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    1. Gracias Ricardo, quizá hubiese sido más aterrador un final abierto. Mi pregunta es, ¿que final le hubieses dado tú al relato? ¿O simplemente hubieses terminado la historia sin el despertar del protagonista? Un abrazo.

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  8. A mi me ha pasado un poco como a Ricardo. Me has mantenido en tensión todo el relato. Asusta de verdad. He tenido que girarme a la puerta mientras lo leía. Un abrazo.

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    1. Pues si, efectivamente una pesadilla dificil de digerir. Por lo demás, espero que durmieses bien. Saludos :)

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  9. Me gustó mucho el ritmo del micro. Muy bueno, Sergio.
    Un saludo.

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    1. Gracias Federico, un placer verte de nuevo por aquí. Saludos!

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